Chiapas, desde mi mirada, son ojos que miran. Mi mirada choca con esos ojos y entiende y no entiende. Ante esta disyuntiva, casi como un susurro llegan estas palabras a mis ojos: “enseñar no es mandar, aprender no es obedecer” … Por eso ahora callo. Porque hay momentos y momentos. Porque hay momentos en los que para decir algo, toca callarse. Ahora es el momento de suspender la crítica que se rebela contra los mitos. Aviso pues para navegantes de la placida ágora ateniense en la que nos jugamos las ideas antes que los cuerpos: cerrad filas, el aire huele a tormenta.
Nosotros hombres y mujeres íntegros y libres, estamos conscientes de que la guerra que declaramos es una medida última pero justa. Los dictadores están aplicando una guerra sucia no declarada contra nuestros pueblos desde hace ya muchos años, por lo que pedimos tu participación decidida apoyando este plan del pueblo mexicano que lucha por trabajo, tierra, techo, alimentación, salud, educación, independencia, libertad, justicia y paz. Declaramos que no dejaremos de pelear hasta lograr el cumplimiento de estas demandas básicas de nuestro pueblo, formando un gobierno de nuestro país libre y democrático (Primera Declaración de la Selva Lacandona. 1 de enero de 1994. EZLN).
Como hace tiempo no ocurría, nuestras comunidades, nuestras compañeras y compañeros están siendo agredidas. Ya había pasado antes, es cierto. Pero es la primera vez desde aquella madrugada de enero de 1994 que la respuesta social, nacional e internacional, ha sido insignificante o nula. Es la primera vez que esas agresiones provienen descaradamente de gobiernos de supuesta izquierda, o que se perpetran con el apoyo sin tapujos de la izquierda institucional. [… ]
Quienes hemos hecho la guerra sabemos reconocer los caminos por los que se prepara y acerca. Las señales de guerra en el horizonte son claras. La guerra, como el miedo, también tiene olor. Y ahora se empieza ya a respirar su fétido olor en nuestras tierras (Ni el centro ni la periferia …. Parte VII (y última): Sentir el Rojo. El calendario y la geografía de la guerra. 16 de diciembre de 2007. Subcomandante Insurgente Marcos).
Nosotros hombres y mujeres íntegros y libres, estamos conscientes de que la guerra que declaramos es una medida última pero justa. Los dictadores están aplicando una guerra sucia no declarada contra nuestros pueblos desde hace ya muchos años, por lo que pedimos tu participación decidida apoyando este plan del pueblo mexicano que lucha por trabajo, tierra, techo, alimentación, salud, educación, independencia, libertad, justicia y paz. Declaramos que no dejaremos de pelear hasta lograr el cumplimiento de estas demandas básicas de nuestro pueblo, formando un gobierno de nuestro país libre y democrático (Primera Declaración de la Selva Lacandona. 1 de enero de 1994. EZLN).
Como hace tiempo no ocurría, nuestras comunidades, nuestras compañeras y compañeros están siendo agredidas. Ya había pasado antes, es cierto. Pero es la primera vez desde aquella madrugada de enero de 1994 que la respuesta social, nacional e internacional, ha sido insignificante o nula. Es la primera vez que esas agresiones provienen descaradamente de gobiernos de supuesta izquierda, o que se perpetran con el apoyo sin tapujos de la izquierda institucional. [… ]
Quienes hemos hecho la guerra sabemos reconocer los caminos por los que se prepara y acerca. Las señales de guerra en el horizonte son claras. La guerra, como el miedo, también tiene olor. Y ahora se empieza ya a respirar su fétido olor en nuestras tierras (Ni el centro ni la periferia …. Parte VII (y última): Sentir el Rojo. El calendario y la geografía de la guerra. 16 de diciembre de 2007. Subcomandante Insurgente Marcos).